SEGUNDO
Desde que desperté y vi a mi mujer a mi costado, durmiendo todavía, pensaba en qué hacer hoy día para hacerla feliz. Hemos tenido problemas estas últimas semanas, pues queremos tener un hijo y no entiendo por qué no se lo puedo dar. Fuimos al hospital y le preguntamos al doctor y nos dijo que teníamos que hacernos unos análisis carísimos, pero con mi trabajo no puedo pagarlo y no sé qué hacer. Claramente noté el enojo de Gloria cuando le dije que no podía costearlo. ¿Acaso es muy difícil para los pobres intentar ser felices? Amo a mi mujer con todo el alma, la amo y daría mi vida por ella, y me apena no poder darle un hijo como ella tanto lo quiere. Las discusiones que estamos teniendo ahora se van a arreglar pronto, muy pronto. Voy a hacer algo hoy para darle una noticia a mi Gloria que la hará feliz y que todo este enojo que me tiene desaparezca. Las peleas entre parejas siempre habrá, uno tiene que saber cómo arreglarlas, poner de su parte. Entiendo su posición, entiendo que...